viernes, 31 de diciembre de 2010

Pasan años

Ha pasado un año...

Y los años pasan. Pasan lentos y pasan rápidos.

  • Pasan lentos cuando pasan meses sin ver a las personas que queremos, sin volver a los lugares a los que pertenecemos / Pasan rápidos cuando nos vemos el mismo día en el mismo lugar que hace un año.
  • Pasan lentos en la enfermedad, en la espera o en el tedio / Pasan rápidos en la alegría o, simplemente, en la cotidianidad ocupada.
  • Pasan lentos cuando hace un tiempo que faltaron los nuestros, pero nos parece ya que hace una vida / Pasan rápidos cuando te has hecho mayor y ya eres un hombre.
  • Pasan lentos... / Pasan rápidos cuando dices 'ya son varios años que pienso en ti' o 'ya son varios años que volví'.
  • Pasan lentos... / Pasan rápidos cuando hablas de todo lo que hacías cuando eras pequeño, y te apetece hacerlo ahora.
  • Pasan lentos... / Pasan rápidos cuando eres el mismo que 365 días atrás.

En general, se ve... que pasan más rápidos que lentos. Aprovechad el año. Dejad huella.

Feliz 2011.

domingo, 12 de septiembre de 2010

Manhattan

"I wanna wake up in the city that never sleeps", cantaba Frank Sinatra.


Manhattan es un gigante plató de cine en el que todos son actores que interpretan perfectamente los estereotipos que todos, a traves de tantas películas, conocemos, y uno duda si la idiosincrasia de la ciudad se llevó al espectáculo, o el espectáculo trajo esa idiosincrasia a la ciudad.

Y es que a uno también le asalta la duda de si no vive en el sitio equivocado, porque Manhattan te hace creer que todo ha sucedido allí. Si pasas por delante del 1120 de la 5ª avenida y piensas que puedes llamar al timbre a Woody Allen, si sabes que en Broadway con la 3ª, justo a los pies del Flatiron, a Marilyn se le levantó la falda, si Yoko Ono te cuenta que a los pies del Dakota asesinaron a Lennon y desde entonces pasea sola por Strawberry Fields, si imaginas que Spielbierg concibió Jurassic Park en el Museo de Historia Natural, si adivinas a Luther King dirigiéndosa a un millón de afroamericanos desde el Great Lawn, si pasas por delante de la Estatua de la Libertad como decenas de millones de inmigrantes, si pagas como holandés 24 $ por la isla, si subes al Empire State y te acuerdas de King Kong o de Tom Hanks y Meg Ryan, si compras acciones en Wall Street, o si se te caen las Torres Gemelas a los pies...

...es cuando casi llegas a pensar que Manhattan es el centro de todo, y que todo lo importante tiene que suceder allí.


Ser taxista es un deporte de riesgo. Ser mendigo es un trabajo digno. Ser famoso, una circunstancia vulgar. Ser excéntrico, una mera imposición de la ciudad. La acera arde, el gentío se desplaza cual marabunta, el neón y las luces te obnubilan. Todos tienen prisa, todos quieren venderte algo, todos son tus amigos hasta que no consiguen de ti lo que quieren. Pero después, te adentras en Central Park, y no recuerdas que te rodean 8 millones de personas en 60 km cuadrados.

Manhattan. El centro de todo. El gran teatro. La Gran Manzana.

Silencio. Se rueda.



domingo, 20 de junio de 2010

Vuelvo

No puedo negar que estaba tan metida en mí, ocupando tanto espacio, que el día que quiso desaparecer, y así sin más borrar su huella, como si no fuera cierto que codo a codo habíamos sacado adelante un duro año, aquel día dejaba un espacio difícil de llenar.

Un hueco súbito en esa parte del ser donde se gestan las cosas que tienen que ver con el afecto, y bueno, yo que soy hombre de ciencias, imagino que como cualquier volumen que repentinamente desaparece de un espacio mayor, el balance de presiones genera instantáneamente un desplazamiento del volumen circundante, que tenderá a llenar el volumen previo desaparecido.

Supongo que así fue. Y el vacío generado respondió absorbiendo cualquier materia, cualquier calor, cualquier afecto que tenía a mano, fuera o no apropiado, fuera o no correcto. Diría que eso fue lo que pasó. Que cerré sus heridas sin curarlas. Que le repuse sin darle luto alguno. Y ni de lejos, quien vino a suplirla me daría la mitad de calor ni la mitad de luz que ella.

Hace muy poco que me daba cuenta de ello...

Así que quiero volver a aquel momento en que se borró, sentir que no pasa nada por descubrirlo tarde y hacer de ella una digna difunta y de mi un digno viudo que no quiera decir a rey muerto rey puesto.

Porque sólo quería contarlo en algun sitio... Por eso vuelvo...

martes, 27 de abril de 2010

Latido jondo

Eu quero amar, amar perdidamente!
Amar só por amar: Aqui... além...
Mais Este e Aquele, o Outro e toda a gente...
Amar! Amar! E não amar ninguém!

Recordar? Esquecer? Indiferente!...
Prender ou desprender? É mal? É bem?
Quem disser que se pode amar alguém
Durante a vida inteira é porque mente!

Há uma Primavera em cada vida:
É preciso cantá-la assim florida,
Pois se Deus nos deu voz, foi para cantar!

E se um dia hei-de ser pó, cinza e nada
Que seja a minha noite uma alvorada,
Que me saiba perder... pra me encontrar...

Amar - Florbela Espanca


Gràcies, amic. Gràcies, Nando.

lunes, 19 de abril de 2010

Un buen día

Hoy no ha sonado el despertador. Ni he desayunado, ni he hecho la cama y, por supuesto, he llegado tarde a trabajar. Allí me esperaba lo mismo de siempre. Mi compañera de despacho, cordial como acostumbra, me ha preguntado por el fin de semana. Le he dicho que no recuerdo por qué cogí un taxi para llegar a casa el sábado, pero no le he contado que he escrito una canción y que me gusta. He leído El País y he visto que comienzan a abrir el tráfico aéreo. Me he sentido tranquilo de que ya casi seguro podré volver a Berlín el día 29. No me he vuelto a acordar de ti hasta que he empezado a hacer cosas y he sentido la desmotivación como una losa. Entonces he pensado que quisiera estar un rato contigo a solas, sólo un rato, como lo he venido pensando todo el trayecto. El trabajo realiza, pero no llena. Es condición necesaria, pero no suficiente. El dinero hace falta, pero no va comprar el amor de los que quiero ni va a salvar la vida de mis enfermos. No va a arreglar nada que valga la pena en el mundo, y sólo consigue hacer que quieras más conforme más tienes. Qué desidia toda la mañana. No paro de pensar. Pienso que no debería haber ido a comer a casa este domingo, pero me equivoqué. Pienso que no debería haber escrito ese e-mail. Pero me equivoqué. Pienso que al leer lo que te di querrías hablar de ello. Pero me equivoqué. Porque siempre que imagino lo que podría pasar, no sucede. Siento que hoy tengo muchas ganas de abrazar a las personas que me importan, pero no habré visto ninguna justo antes de acostarme. Cómo malgasto el amor y qué necia manera de aliviarlo. Quisiera saber cómo te quieren, mucho, poco, suficiente, si tienen las ganas de verte que yo tengo, si escriben sobre ti como yo hago. Lo ignoro. Lo abandono. Me siento como al principio de todos los caminos. Increíblemente cansado de saber que todo el campo ya está sembrado, y que algún día, muy lejano, algo habrá de florecer y dar fruto. Pero el camino es largo, mucho más de lo previsto. Y agota una barbaridad. He mirado el correo personal, y alguien se preguntaba que qué habría sido del mensaje que le escribió a la chica del otro día. Entonces he caído en que los dos últimos mensajes que he escrito a chicas de una noche no han sido contestados. No entiendo esa ingratitud, esa manera de querer expresar que somos mierda y que no merecemos ni ser contestados. Se me han quitado las ganas de flirtear para siempre. Me he puesto serio y he intentado trabajar un poco. Alguien me ha dicho este fin de semana que los jóvenes de hoy en día no conocen ni la disciplina, ni el respeto ni el sacrificio. Yo le dije que hoy en día no hay nada por lo que luchar, así que es lógico que compitan por tener más amigos en Facebook, pero no entienden qué es que su futuro dependa de su esfuerzo, ni que su respeto puede hacer de éste un mundo más justo y mejor. Reflexioné si sería un buen padre. Si podría educar a mis hijos según los valores que mis padres me transmitieron y algunos otros dignos que he ido sumando a lo largo del camino. Algo en mi interior dijo que sí, pero con la nostalgia de cuando hay un largo camino que andar. Con la nostalgia del amor, de los besos, de las palabras y de los abrazos que no han llegado. Son ya las 5 y no he hecho nada. Bajo a las clases de inglés. Siempre hago reír a la profesora, pero hoy no tengo ganas. A veces pienso que le gusto, pero paso de insinuarle que ella también me gusta. Da igual. Será una más, al fin y al cabo, de las que no contestan los mensajes. He llegado a casa bastante tarde y el tiempo se ha esfumado en tareas del hogar. Cuando me he sentado a escribir esto me he dado cuenta que tenía que poner una lavadora y planchar, algo que, como las clases de inglés, me recuerda que ha pasado una semana más y que nada ha cambiado en mi vida. Que soy una semana más viejo, que no sé hacia dónde camino, que no sé dónde pongo el amor ni dónde pongo lo hallado.

viernes, 19 de marzo de 2010

26

26 es el número natural que precede al 25 y antecede al 27.

En matemáticas
  • El 26 es el único número que queda entre un cuadrado (25 = 52) y un cubo (27 = 33).
  • Un rombicuboctaedro tiene 26 caras.
  • 26 es un repdigit en base 3 (222) y en base 12 (22).
  • En base 10, el 26 es el número más pequeño que no siendo un palíndromo, tiene un cuadrado (262 = 676) que es palíndromo.
En religión
  • 26 es el número gemátrico del nombre verdadero de dios - YHWH.
En ciencia
Palíndromo, gemátrico y bosónico. 26 años.

domingo, 14 de marzo de 2010

Zu vermieten

sábado, 6 de marzo de 2010

With a little help from my friends

domingo, 28 de febrero de 2010

La noche en que cruzamos el Mississippi

Había un libro esperando para ti, chica Sugus.

Foto: fuente.

Zahara tocó en la Wah Wah con los Fabulosos y nos puso la piel de gallina. No importó que se dejara Domingo astromántico y que la dulce chica con la que estuve hablando todo el concierto fuera bollera. Había un libro esperando para ella, así que esperé a que saliera del backstage y todos los grupis se hicieran las correspondientes fotos para el Caralibro. Yo soy más caballero, no me va lo de la foto (y bueno, tampoco tenía cámara). Así que Zahara, ha sido un concierto estupendo, gracias por volver por aquí, y te quería regalar un libro de sonetos que he escrito. Espero que te guste.


Con la sonrisa más bonita del mundo me hizo una reverencia y me dio dos besos. Y Spuni y yo salimos satisfechos del local con más proporción de tías de toda Valencia, en ese momento exacto. Qué bien sienta, de vez en cuando, llegar a casa un sábado a una hora respetable y sobrios para poder aprovechar la mañana del domingo, comentábamos. Y en ese preciso instante, desde un balcón lleno de gente y luces estroboscópicas, unas chicas nos gritan:

- ¡Eh, subid! ¡Llamad a la puerta 2!

Instantes después entrábamos a una bizarra fiesta de disfraces españolerasmus y nos servíamos cerveza fría de la nevera. Al más puro estilo de El café de Nicanor, fuimos conociendo a los presentes:

  • R, amigo de un inquilino. Confundió nuestros nombres 5 veces. Aseguró haber estado con varias tías buenísimas en su vida. Segundos después hizo un bochornoso intento de ligue con dos chicas. Me pidió el número de móvil no sé para qué. Vi como se lo apuntaba mal. Creo que no volveremos a hablar nunca.
  • M, amiga polaca de una inquilina. Cuando llegamos aún podíamos intuir que, por el maquillaje de su piel, iba disfrazada de Pitufina. Cuando nos fuimos del piso tenía más un aire a Rambo.
  • P, amiga de alguien. Tenía los ojos saltones como Betty Boop y una cara de tonta que no podía disimular. Quería ir, valga la redundancia, a Betty Boop sólo si le pagábamos la entrada. Claro...
  • X, amiga de alguien. No supimos cómo se llamaba. En un momento dado quiso volver del balcón al interior del piso, pero entró por la hoja equivocada de la ventana. Del rebote contra el cristal, hizo un torbellino y terminó por fin dentro. No pude evitar reirme. Cuando le pregunté are you OK? ella contestó yes, I'm fine, pero no me miró.
  • C, dueña del piso. Estudiaba Comuniación audivisual en el CEU y era de Murcia, pero no tenía acento ostia pijo huevo. Vestía de Dorothy con unas graciosas coletas y se había pintado pecas en la mejilla. Quería irse de Erasmus a Berlín pero antes, cumplir los 21 en Las Vegas dándole en toda la boca al segurata que no le habría dejado entrar 24 h antes en un Casino por no tener la edad mínima. Había estado 1 vez en Montepicayo. Puso 2,5€ al 21 y salió. Se llevó más de 90€. Quería hacer lo mismo en Las Vegas. Me confeccionó en su taza del desayuno el último cubata con las sobras de las sobras: ron de 3€ con ginebra. Fue un gesto muy bello que yo aprecié. Quiere que quedemos a tomar café en su casa.

A Spuni se le ocurrió, en cierto momento, que con la cazadora de cuero y la taza tenía un aire a Pepe Navarro, el único hombre capaz de dar dos noticias consecutivas de cariz diametralmente opuesto:

"Con todos ustedes... ¡Crispin Clander!... y en otro orden de cosas... mueren 14 personas en Irak..."

Así que ayer noche cruzamos el Mississipi. Y después, ya sabéis...

- "Y después, yo".

martes, 23 de febrero de 2010

Das Leben der Anderen

La vida de los otros. Nos pasamos el tiempo observando la vida de los otros.

Comenzamos mirando las zapatillas de los otros; qué ropa llevaban puesta. Ahora miramos la marca, la estética, porque por algún motivo que desconozco, pensamos que la ropa de uno tiene mucho que ver con su carácter. Miramos su coche, su casa, su pareja, sus gustos. Cuestionamos sus costumbres. Intentamos incluso cazar de reojo la nómina, averiguar en qué invierten el dinero.

La vida de los otros. Nos pasamos el tiempo criticando la vida de los otros.

Saldrán en televisión y pondrán a parir a quien toque cada vez; criticarán con quién esté, lo que haga, sacarán punta y doblez a cualquier comentario, buscarán la polémica en el roce. Nosotros haremos lo mismo. Pensaremos que qué hortera o qué inapropiado, o tal vez que por qué se complica la vida de esa manera, que cómo tolerar esa actitud, que se ha hecho rico porque es un ávaro. Diremos que qué poco trabaja, qué poca seriedad, o qué exagerado. Que siempre llega tarde sin motivo, que tiene lo que se merece o que es demasiado afortunado.

La vida de los otros. Nos pasamos el tiempo irrumpiendo en la vida de los otros.

Entraremos casi sin llamar, sin pedir permiso; opinaremos sobre cualquier tema que no sepamos y querremos que se nos considere y se nos escuche; meteremos baza, haremos mala sangre; daremos consejos que creemos sabios; buscaremos respuestas en terrenos cenagosos. Intentaremos dar un buen ejemplo, transmitir que lo nuestro es lo mejor, poner solución a ciertos males endémicos.

Así llegaba yo, irrumpiendo en la vida de los otros...

Nos pasamos la vida en la vida de los otros. Pero entrar en la vida de los otros, a menudo, duele.

Yo no quiero volver más a la vida de los otros.


P.D.1.: ¿Quién me lee desde Bochum?
P.D.2.: ¿Quién es el anónimo de las últimas entradas?

domingo, 21 de febrero de 2010

Ich bin berliner

De una vida ejemplar me di a la huida,
de mi pensar, limé la cuadratura,
con veintiuno, Blackjack, pedí partida
y unos puntos y aparte de sutura.

Rocé el amor, viví de cualquier modo,
pernocté sin billete en el tranvía,
puse el futuro a nada, salió todo,
y amanecí, de noche, a mediodía.

Supe decir que no, extrañé mi casa,
lloré al decir adiós a mis amigos,
aprendí que el pasado siempre pasa.

Hoy sigo vivo en fotos de cabina
y tengo mil recuerdos por testigos
que lo pueden contar, Ich bin berliner.

Ich bin berliner

domingo, 14 de febrero de 2010

Archivo

- "Al vertir sal en un sistema de agua con hielo, ésta baja el punto de fusión del hielo incluso por debajo de -10ºC. Cualquier cosa que pongas a refrigerar, se helará enseguida, porque el calor para fundir el hielo lo tomará del elemento a más temperatura".

- "Los microondas funcionan emitiendo una radiación electromagnética de 2,45 GHz que hace vibrar las moléculas de agua contenidas en el interior de los alimentos. De esta manera se calientan, y no lo hacen, por ejemplo, los vasos de cristal".

Conversaciones interesantes... Feliz San Valentín, a ti que puedes, si lo celebras.


FOTO: "Mensajes escondidos en imágenes de archivo."

martes, 2 de febrero de 2010

Ecos

Ecos de "Yo estuve allí":

Siempre hay un espacio donde los poetas se juegan la vida: "es el espacio de las palabras sueltas". Unirlas en los poemas, es labor que los poetas tienen. Esa es su batalla silenciosa. Ese es el gran drama del mundo, el dulce nacimiento donde cada palabra pueda quedar ligada a lo que debe.


Hacer de las palabras sueltas una acción sencilla, un sentimiento transparente, un pensamiento limpio de peso y gravedad, es ir haciendo verbo poco a poco, es ir haciendo surcos en la luz, es ir haciendo trazos en el viento.

¡Difícil tarea parecen tener los poetas de la tierra! Mas... para ello nos dieron, un corazón tan grande como la noche de los cielos... para así ponerle estrellas a los sueños... y unos dedos ¡tan pequeños!... para que nunca pudiéramos sentir... que de los versos, somos dueños.

Tengo la certeza de que los dioses nos soñaron humildes y sumisos..., pequeños... para que desde nuestra pequeñez pudiéramos sentir su grandeza: su Poesía.

Siempre hay un espacio donde los poetas se juegan la vida...

Lector anónimo.

sábado, 30 de enero de 2010

Códigos

CÓDIGO BRO

En algún artículo del Código Bro bien se podría citar:

"Todo Bro debe hacer lo imposible para que su amigo duerma con el ligue de la noche".


CÓDIGO CHIC

En algún artículo del Código Chic bien se podría citar:

"Toda Chic debe hacer lo imposible para que su amiga no duerma con el ligue de la noche".


Sutiles detalles que nos hacen diferentes, aunque por suerte aparezca un Bro cuando menos te lo esperas.

sábado, 23 de enero de 2010

Km. 0

Me lo dijo una vez mi amigo Joan. Cambiar de vida cuesta tiempo, y dinero.

A mí me ha costado algo más. Casi, los lazos de alguna amistad; de milagro, la conservación del buen humor. La paciencia de mi familia y una aureola de auténtica potra son los artífices de que haya aguantado hasta el momento con la fortaleza suficiente.

Lo vi como el ojeador que observó por primera vez a Messi, y supo que tenía que traerlo al Barcelona. El piso no tenía ningún mueble, pero sí un potencial increíble. Me imaginé decorándolo con gusto y primor, haciéndome una habitación grande como en Berlín, invitando a cenar a mucha gente en su gran salón, desayunando café con leche y tostadas en el balcón, acostándome con ciertas mujeres en mi cama grande... Era una apuesta muy seria porque, como muchas veces hago en la vida, me enamoré de lo que podía ser el piso, y no de lo que era.

Pero el casero aceptó comprar los muebles que le presupuestáramos, y con ello comenzó la gran odisea de la pesquisa de cada mueble con la mejor relación calidad/precio. Ahora, casi con el conjunto de compras cerrado, un consejo: evitad Conforama. Son unos furcios que todavía no me han traído el armario 2 meses después.

Conforama, Merkamueble, Factory Colchón, IKEA... Todo ha sido husmeado por nosotros, y cada rato de las tardes lo hemos usado para comprar, traer y montar. En ello se ha ido un par de meses en los que desconecté las neuronas de mi alrededor habitual y las conecté a las cosas del piso. Ahora ya, empiezo a reestablecer el contacto con la gente.


El piso está quedando fabuloso. Son 160m2, y Pilu y Blanca que ya lo han visto bien saben que me odian porque lo quisieran para ellas. Todo es más grande que en casa de mis padres, por lo que yo lo considero enorme. En este piso he aprendido a ser decorador, pintor, estucador, electricista, montador... Estoy muy orgulloso de la elección que hice de quedarme a vivir en Valencia, de buscar estos compañeros de piso y de haber casi concluido con éxito el traspaso de vida de un lugar a otro.

Así que otro hogar que dará otra lumbre. Una nueva vida que empieza, y yo estoy en el Km. 0 de cualquier camino. Y de un tiempo a esta parte,

sonrío menos; desconcierto,
ella no escribe; desaliento,
me falta alguien; desapego,
me desvinculo, desarraigo.

Todo es raro cuando no se está acostumbrado a ello. Ahora que está volviendo la normalidad a mi vida, imploro al orden, a la rutina, a la poesía, a las musas, al amor, y en su defecto, al sexo, a la dignidad de esperar movimientos si ella tiene algún interés en mí, y a esos libros o versos que te arañan el corazón, o esos días que llegan muy muy muy de vez en cuando, que compensan los no tan buenos 364 anteriores.

martes, 5 de enero de 2010

La darrera vegada

Exactament 8 mesos i 11 dies des de la darrera vegada que et vaig vore. Entremig, com sempre, et marxes i apagues la tele. Estaria bé deixar-la engegada, sentir mentretant soroll de tu. A la fi de l'espera, com sempre, me'n recorde de tu, tinc ganes de guitarra, hi ha molts compromisos, però també temps per quedar.

Així que allí em tens, segut a un banc, com sempre. Aguardant que arribes una mica tard. Esperant divisar el teus cabells, i després a tu, apropar-te a sobre d'una bicicleta. Com sempre. I jo no sé molt bé què dir 8 mesos i 11 dies després; que estàs igual, radiant, com sempre, que el temps no passa per tu. Són eixes coses que pense, les que calle, i altres que no raone, les que dic atolondrat. Tu xarres molt apresa i et molesta la calor. No ho dic més. Com sempre.

Et prepare una sorpresa. Et sorprenc amb un nou pis, i t'agrada molt. A mi m'il·lusiona que t'agrade. El compares amb el teu, i dius no té color. La comparació és, però, improcedent. No es poden comparar dos llars per albergar dos vides distintes. Dinem de menú al costat de casa. Compartir plats és bell i es proben més coses.

Et faig un resum dels meus últims mesos de vida. Quina tabarra de monòleg. Ara parla tu, que jo també vull saber-ne. Tot et va bé, dolç, equilibrat. Dius que si vaig a Karlsruhe, que si em compres entrades, mare quin susto si ho arribes a fer! Després has de marxar, han passat quasi dues hores i no hem parlat de res trascendent. Insuficient, fins i tot, per ficar-nos al dia.

Vols pagar, però no et deixe a dures penes. Després tornem a pujar, i ja te'n anaves però ahí el tens. El meu llibre. El teu llibre. O bé, un llibre que parlarà de nosatres, quan cap dels dos estiga. Somrius travesa, fullejes, murmures algo, el guardes amb cel. El vols pagar, però jo no et deixe. T'emperres, no puc detindre't. No vull els teus diners perquè em pesen com un plom a la butxaca. Per això els donaria al primer que me'ls demanà al carrer Colón. Perdona'm.

T'acompanye al carrer, per l'acera, al semàfor. Ja falten 10 segons, i altra vegada has passat com un llamp, com un huracà; vull dir sense poder gens vore't, vull dir sense poder gens detindre't. Ja falten 5 segons, i t'abrace, torp, com sempre. I en el darrer segon et soltes i t'allunyes com una papallona. Jo em quede quiet, molt sol, i em ve al cap aquell sonet que vaig escriure pensant en tots aquestos darrers segons:

Siempre que me secuestras se me olvida,
intentar escapar, pedir rescate,
me impregno de tu bálsamo, suicida,
me acicalo de ti, completo orate.

Después, a la hora de la despedida,
escurren lágrimas hasta el gaznate,
si detrás de tu adiós hay otra vida,
que baje Dios y que me la arrebate.

Insensato, síndrome de Estocolmo,
estoy pidiéndole peras al olmo,
la paz que tu presencia vaticina.

Me encara la impiedad de otro combate,
y te recuerdo, cuerdo de remate,
ángel, alada, blanca, hada madrina.

Entrega en mà. Somni complit. Descanse tranquil. I aquesta és la darrera vegada que tinc que parlar de tu.


P.D.: Molt prompte, El Bosón de Higgs trenca el sil·lenci i torna amb la crònica d'una nova vida. No s'ho perdeu!