domingo, 30 de noviembre de 2008

Escenarios

Cuando el pasado jueves 27 me animé a colaborar en un pequeño concierto que ofrecía David, debutando oficialmente en el mundo de los cantautores, no era muy consciente de que estaba a punto tachar uno de los apartados de la íntima lista de cosas que quería hacer en vida.

El lugar elegido fue el bar l'Ermità, en el barrio del Carmen, un acogedor bar de complicada arquitectura, el cual sólo permitía albergar a unas 40 personas en la zona propiamente de conciertos. Con la inestimable ayuda de Pablo pusimos a punto los altavoces, la mesa de mezclas, las guitarras y los micrófonos. Como aún somos humildes, y no muy famosos, nos conformamos con un taburete para sentarnos algo apretados e incómodos.

David comenzó el concierto con sus canciones. El público era, en su mayoría, amigos y conocidos suyos, al mismo tiempo que fans incondicionales. En un momento dado, entré yo a escena para acompañar a David en un par de canciones con guitarra y armónica. Y tras ello ya me quedé solo delante del toro, para hacer mi debut como cantor, más apropiado que cantautor.

Mientras intentaba que no me atacaran la ronquera y los nervios, quise contar a la gente que estaba muy agradecido e ilusionado de estar formando parte de este debut, que mi producción artística no es tan prolija como la de David, pero que sin embargo me gusta escribir sonetos, haciendo hincapié en que la poesía es un concepto mucho más amplio. Una canción puede ser poesía, unos versos, un paisaje, incluso unos ojos también.

Les conté que el cantautor de mi adolescencia había sido Ismael Serrano, a quien empecé a escuchar de muy joven. Entonces, podría ser, que aquella cinta que sonaba en un cassette, cuando yo aún no me había iniciado con la guitarra, en un lugar lejano al que no puedo volver, hubiera sido la primera piedra para que yo, muchos años después, me viese sentado en un taburete interpretando aquella canción que sonaba: "Últimamente".

Después proseguí con "Avión en tierra", de Quique González. Algo más desafinada, algo menos preparada. Toqué a continuación "Algo contigo" para que la cantara David, quien luego prosiguió con el concierto con la colaboración de Pablo poniendo voz a un par de canciones. Y al final, como todo buen concierto, un vis para cantar "Te lo dije" y "En el backstage" de Quique González.

Al terminar, llovieron las felicitaciones, en especial para el artífice del concierto. Yo estaba feliz, como feliz se está después de hacer algo por primera vez con buen resultado. Y feliz porque alguien muy importante para mí había hecho el esfuerzo de venir a verme.

Quién sabe que precederá a este pequeño punto de inflexión en la vida del cantautor y del intérprete. Algún concierto improvisado en la calle estas Navidades, alguna invitación de un local más grande... En cualquier caso, el pasado jueves, David dio un pequeño salto hacia la fama,

y yo, hacia la felicidad.

P.D.: Y por si faltaban escenarios, Quique González, al día siguiente, nos enseñó a dar un concierto en la sala Mirror.

6 comentarios:

rakejov dijo...

m´agradaria sentir una de les teves cançons aquest Nadal tan fred en algun banc amb bufanda i gorro de llana i sense guants

Anónimo dijo...

me habría gustado ir... ya podías haber avisado! deshonrao'!

Cristina

Anónimo dijo...

Emotivas palabras querido amigo Julián. El jueves pasao todos los que salimos allí dimos un pequeño salto mortal (de necesidad)...

Trataremos de repetirlo...

PD: He visto un par de vídeos que demuestran que lo que acabas de contar es cierto. Me los tienen que pasar... Por desgracia, solo grabaron las dos últimas canciones. Pero algo es algo... y sales tu cantando "te lo dije". Tuviste suerte chaval.

El cantautor enmascarado

Àlbert dijo...

Carai! Hi ha videos en youtube on te puguem vore?

Ahir vam fer una paella tremenda! Van vindre a casa els meus amics mexicans i la meua amiga xinesa. Després anàrem a passejar pel famós canal de Nyhavn, Kongens Nytorv i Strøget. En la plaça de Kongens Nytorv han posat, com tots els anys, una pista de gel a l'aire lliure. Tot amb llumenetes de Nadal, molt bonic. La vesprà acabà de manera molt agradable, prenent un té en un café i xarrant fins bastant tard.

Tot va molt bé, llevat el fet que se vos troba a faltar. Espere que a part de coronar-te com cantautor estigues entrenant al truc i al snooker, perquè si no la pallissa que rebràs com a regal de Nadal serà memorable.

Un abraç (artiste)!

Albert

Anónimo dijo...

Me alegro Juli, ya era hora de dejar a más gente disfrutarte cantando ;) lástima que ya no nos pilles en la resi para unirnos a tu entregado público...
Y si empiezas a ser famoso, los pies en la tierra, no te olvides ^^
Un beso!
Ire

Anónimo dijo...

se que mientras cantabas la de "algo contigo", te acordabas del anuncio de mayonesa en el que la ponían hace un par de años, jaja. Ese "te dije alguna vez que te quiero?" del dulce niño argentino me llegó al alma.

me alegro, como dice Ire, de que permitas a otra gente disfrutar de tu maravillosa voz,
llegarás lejos en lo que te propongas y estaremos ahí para aplaudirte y sacarte de copas

miles de besos